El aprendizaje de idiomas requiere de una serie de cualidades que es preciso conocer si se quiere tener éxito en este objetivo. Todos los años por esta época, seguramente coincidiendo con el mercado de fichajes de la temporada de fútbol, nos maravillamos de la facilidad con la que algunos extranjeros aprenden a chapurrear español, y sin embargo nos frustramos por las penurias del españolito de a pie para aprender a decir dos palabras en inglés. Y es que “it’s very difficult todo esto”, y nunca mejor dicho.
De modo que a la pregunta que me plantean solo medio en broma todos mis amigos españoles: “¿existe algún tipo de campo magnético bajo la Península Ibérica que impide a sus habitantes aprender otro idioma”? La respuesta es que no. Se puede aprender un idioma en España, pero hace falta que el propio alumno ponga de su parte algunos haberes.
¿Cuáles son estas 5 cualidades que hay que tener para el aprendizaje de idiomas?
1. Motivación
Al final es lo más importante. Me maravilla comprobar como hace años la gente conseguía aprender idiomas con métodos que hoy nos horrorizarían, pero el caso es que aprendían. Y aprendían principalmente porque estaban motivados y querían aprender. Y ese sigue siendo el factor clave.
Y aunque un profesor puede ser “motivador”, la motivación realmente la tiene que aportar el alumno. ¿De verdad estás motivado para aprender? Lo notarás en seguida. ¿Estás dispuesto a trabajar en casa? ¿Estás faltando a clase? Estos son claros indicadores de tu nivel de motivación.
2. Buen oído
Dado que en español funcionamos con tan solo cinco vocales y unos pocos diptongos, mientras que inglés ese número se eleva a más de veinte, un buen oído que capte esas leves diferencias de matiz nos ayudará tanto a comprender como a pronunciar mejor.
Llegado este punto, casi todos mis estudiantes aseguran tener mal oído. En realidad, todos tenemos mejor oído de lo que creemos, y la prueba es que somos capaces de distinguir instrumentos musicales en una orquesta o identificar una voz en particular en una sala llena de gente que conversa animadamente. Pero es verdad que un buen oído te será una ayuda, y un oído desentrenado será un obstáculo a vencer si quieres aprender a pronunciar bien.
3. Buena memoria
“Todo el mundo se queja de su memoria, pero nadie de no tener criterio”, decía el francés La Rochefoucauld. Bueno, el caso es que con criterio o sin él (aunque mejor no despreciarlo tampoco), la memoria es de extrema utilidad para aprender inglés. La razón es que mientras que el castellano y otros idiomas afines son de una única procedencia, y por lo tanto las reglas gramaticales son bastante previsibles, el inglés procede de tantas lenguas que es casi imposible formular reglas, y las pocas que existen deben formularse con un sinnúmero de excepciones, por lo que muchas veces es más útil aprender “de memoria” cómo se debe decir algo que intentar deducirlo de una regla. Tener buena memoria, (¿o acaso cierta intuición?) será una ayuda para reconocer la opción correcta en caso de duda.
4.Tiempo
Se calcula que se necesitan unas 600 horas de clase y otras 300 de estudio personal para llegar a dominar el inglés partiendo desde cero. ¡Lo cierto es que son muchas horas! ¡Pero que no cunda el pánico! Después de todo, la mayoría de nosotros no empezamos desde cero y tampoco necesitamos llegar a un nivel bilingüe. Es más que probable que con la mitad de ese tiempo hayamos cumplido de sobra nuestros objetivos. Aun así… es mucho tiempo. ¿De dónde lo vamos a sacar? ¿De actividades de ocio, de la TV? ¿Estaríamos dispuestos a sacrificar tiempo de trabajo por nuestra propia formación? La cuestión del tiempo tiene más importancia de la que parece…
5. Arrojo
Ya es proverbial el sentido del ridículo de los españoles. “Antes morir que decirlo mal” pero el caso es que, de la misma manera que un niño solo aprende a andar a base de intentarlo y caerse una y otra vez, solo se aprende inglés a base de intentar hablar, y al principio de hacerlo mal. Y si no estamos dispuestos a sufrir algún malentendido, incluso a hacer el ridículo de vez en cuando, será difícil que salgamos de esa especie de “inglés de salón” que reservamos únicamente para nuestra clase de inglés.
No sabría decir si pongo el listón muy alto o te resulta muy asequible, pero lo que es cierto es que el mejor profesor del mundo no va cambiar tu carácter para que tengas más arrojo, ni va a encontrarte el tiempo que necesitas para el aprendizaje de idiomas, ni va a suplir una falta de motivación poniéndola de su parte.
Si eres capaz de examinarte y decidir que tienes estos cinco haberes a un grado razonable para tener éxito en el aprendizaje de idiomas, te garantizo que aprenderás.
Me lo cuentas el año que viene.
David Warner
Director ASTEX
Un comentario
David Warner gracias por tu articulo, es verdad estas cualidades no te las da nadie, ni el salon, ni el profesor, solo tu mismo y cuando de verdad tienes motivacion, solo debes buscar ya que en internet hay muchas herramientas, aplicaciones y recursos totalmente gratuitos para aprender idiomas.